sábado, 17 de abril de 2010
La terapia en piscina combina la temperatura del agua y las fuerzas físicas de la inmersión (flotación, presión hidrostática, factores hidrodinámicos) con ejercicios terapéuticos. Se utiliza, fundamentalmente, cuando se precisa la ejecución de ejercicios asistidos o resistidos de las extremidades, sin carga sobre las articulaciones y músculos. En inmersión, pueden reeducarse la marcha, el equilibrio y la coordinación, antes de que la fuerza muscular o la consolidación ósea sea completas.
La terapia en piscina, al igual que los otros métodos hidroterapéuticos, se utiliza integrada dentro de un programa terapéutico rehabilitador. La inmersión en sí no es un fin, sino más bien una etapa que ayuda al paciente a liberarse poco a poco en el medio acuáti¬co, para después hacerlo fuera del agua. La verdadera finalidad de la hidrocinesiterapia es, por lo tanto, salir del agua con más independencia para las actividades de la vida diaria y la marcha.
Medios técnicos
Para la realización de ejercicio terapéutico en el agua se utilizan los tanques y las piscinas. Los tanques tienen una capacidad limitada, por lo que sólo permi¬ten el tratamiento de un paciente. Existen diversos tipos, pero el tanque terapéutico más utilizado para movilización e hidrocinesiterapia, que permite la inmersión de todo el cuerpo, es el tanque de Hubbart o de Trébol. Las piscinas terapéuticas tienen formas y tamaños muy variables, según las necesidades y los fines a que son destinadas. Se dividen en piscinas colectivas de movilización, de marcha y de natación.: Piscinas y Tanques
TINA DE HUBBART O DE TRÉBOL
Este tanque para tratamiento individual permite la inmersión completa de todo el cuerpo. Tiene forma de alas de mariposa o de trébol, para permitir el mo¬vimiento de las cuatro extremidades y el acceso del terapeuta al paciente (Fig.4). Es muy útil para tratar a pacientes que necesitan movilización en agua caliente, para mantener la gama de movimien¬tos y disminuir el dolor. En unos casos, presentan gran incapacidad que les impide la deambulación (artritis reumatoide en fase de exacerbaciones, cuadriplejia, hemiplejia y pacien¬tes con quemaduras, que precisan la movilización en medio estéril, o con heridas abiertas o incontinen¬cias, que contraindican el uso de la piscina colectiva. Estos tanques están equipados con un sistema de grúa para situar al paciente dentro del agua. También puede acoplárseles una turbina, para crear turbulen¬cias y potenciar, así, el efecto del baño caliente.
BAÑOS DE VAPOR.
Son aplicaciones calientes con carácter terapéutico. No poseen peligros o riesgo de lesiones. Ayudan a mejorar el aparato circulatorio mediante la vaso dilatación y otros efectos beneficiosos para el aparato cardiovascular. Actúan también relajando y disolviendo las mucosidades.
Indicaciones.
Indicado en las inflamaciones agudas y crónicas de senos maxilares.
También en procesos purulentos.
Enfermedades de las vías respiratorias altas.
Impurezas cutáneas.
Dolores de cabeza de origen circulatorio.
Resfriados, catarros, tos, rinitis...
Contraindicaciones.
Cataratas.
Dolencias inflamatorias de la piel.
Debilidad general, hipotensión.
Fuerte arterioesclerosis.
Efectos.
Encontramos que los baños de vapor ablandan, desprenden y disuelven mucosidades, activa las secreciones, efecto antiinflamatorio, depura la piel, provoca sudoración, activa el metabolismo, propiedades antiespasmódicas y disminuye el dolor.
Debemos tener precauciones en realizar baños de vapor sobre un suelo caliente, así como evitarlo en pacientes con presión sanguínea inestable.
BAÑOS.
Pueden ser totales o parciales. Apoyados con la utilización de hierbas medicinales o con talasoterapia (agua de mar, algas, sales...) pueden potenciar y optimizar sus efectos beneficiosos.
La intensidad del estímulo del baño varía según la duración, la extensión corporal expuesta, la temperatura del agua y la fuerza de reacción del individuo.
Los beneficios de los baños son tanto físicos como psíquicos.
Influencias físicas.
Los baños a temperatura caliente actúan provocando la sudoración y espesan la sangre, favoreciendo así la eliminación de residuos celulares.
Esta acción lleva también a una disminución del azúcar.
Los baños fríos producen mayor dilución de la sangre, aumentando la azúcar.
El peso del agua actúa sobre venas, vasos linfáticos, trasladando el caudal sanguíneo a órganos internos del organismo favoreciendo el riego de estos.
La fuerza del agua actúa sobre el aparato locomotor en afecciones degenerativas articulares, así como realizando efecto masaje sobre músculos y estructuras.
Influencias psíquicas.
Según los aditivos que añadamos y la temperatura del agua llevan a estimulaciones o relajaciones, conduciendo al bienestar físico y psíquico, aliviando tensiones y stress.
La absorción de los aditivos por la piel hace que penetren en la sangre produciendo el mismo efecto que tomas relajantes o medicamentos...
tecnicas hidroterapicas
La hidroterapia puede aplicarse tanto en forma motriz, es decir, de forma externa y utilizando y aprovechando la fuerza y propiedades del agua, como en ingesta, es decir, mediante el consumo regulado y controlado de aguas medicinales o de manantiales con características y propiedades específicas.
CHORROS.
Aplicados a zonas específicas del cuerpo, extienden sus efectos a distintas partes del cuerpo. Encontramos dos tipos de chorros:
-De superficie: Actúan ejerciendo poca presión sobre el sujeto, proporcionándole un eficaz manto térmico de agua. Este manto puede ser frío (agua hasta 18 º C), templado (entre 18 y 22º C) o caliente (hasta 36 - 38º C). Los encontramos también ascendentes, que partiendo de la temperatura corporal llegan hasta 42º C.
-De presión: Además de la estimulación térmica actúan también, de forma mecánica, la presión del chorro sobre el organismo. Se deben ajustar la distancia y la presión del chorro.
Efectos.
Los chorros producen una estabilización de la temperatura corporal por el efecto que ejercen sobre capilares, venas y vasos linfáticos. Según el lugar donde los apliquemos ejercen influencia sobre una u otra parte del cuerpo. Así los chorros de rodilla y muslo actúan sobre la vejiga y las hemorroides, junto a los órganos del vientre y la pelvis. Los chorros de brazos, pechos y espalda actúan sobre órganos respiratorios y cardiovasculares. Los chorros de nuca y lumbares actúan sobre la tensión muscular de la columna vertebral. Los chorros faciales o de embellecimiento ejercen influencia en enfermedades crónicas de vías respiratorias superiores, así como en los senos frontales y maxilares.
Algunas contraindicaciones de la hidroterapia
-Enfermedades infectocontagiosas
-Enfermedades agudas con fiebre, patologías víricas comunes
-Enfermedad respiratoria o cardiológica de gravedad extrema o descompensadas que precisen otros tratamientos más agresivos
-Algunas enfermedades de la piel o de las mucosas
-Enfermedades micóticas
-Enfermedades neurológicas o secuelas de éstas que imposibiliten la permanencia en la piscina.
Para qué tipo de personas se aconseja la hidroterapia.
Personas con problemas cardiorrespiratorios leves o moderados.
Personas sedentarias y de escasa actividad física en su día a día.
Problemas psicomotrices, de coordinación dinámica general y equilibrio tanto dinámico como estático.
Falta de tono muscular, hipotonía y atrofia general.
Escasa movilidad articular y flexibilidad.
Personas nerviosas, intranquilas, estresadas y con dificultad para relajarse.
Problemas de baja autoestima, escasa autoconfianza y de expresión negativa en el devenir diario.
Actitud postural incorrecta.
Falta de ritmo y agilidad.
Lesiones generales de toda la columna vertebral (cervical, dorsal y
lumbar)
Y en general para todas aquellas personas amantes del medio acuático, y con ganas de realizar ejercicio.
Actividades físicas a desarrollar en el medio acuático.
Estiramientos o streching para la mejora de la flexibilidad.
Se pretende mejorar el rango articular de las diferentes partes afectadas o limitadas en movimiento, como hombros, rodillas, cadera, etc. De tal forma que hombros dolorosos por ejemplo, con escasa funcionalidad adquieran una movilidad perdida desde hacía tiempo. Además, de remitir en gran parte las molestias y sensaciones de invalidez en muchos casos.
Actividades para la mejora de la capacidad aeróbica.
Esta capacidad permite a la persona realizar actividades físicas durante períodos de tiempo prolongados. Esto implica que el corazón, que es el principal motor cardiovascular se transforme en una bomba más fuerte y eficaz. En personas que están pocos o nada entrenados este cambio es bien notable, ya que sus ganas por realizar sus tareas cotidianas y su día a día cambia para bien. No se cansan tanto para llegar al gimnasio, les cuesta menos realizar sus faenas, etc.
Para conseguir estos beneficios es bueno reseñar que el trabajo cardíaco oscilará entre el 65-85% de la frecuencia cardiaca máxima.
Actividades para mejorar la resistencia músculo esquelética.
La resistencia músculo esquelética es la capacidad biológica que permite prolongar durante el mayor tiempo posible un esfuerzo de intensidad máxima.
Viéndose implicados huesos, articulaciones, músculos, tejido conectivo, tendones y ligamentos; partes dañadas en gran medida en gente mayor, sedentaria o lesionada. Observando la mayoría de estas personas limitadas su capacidad de realizar un determinado esfuerzo por un tiempo prolongado. Por ejemplo, una persona afectada con una epitrocleitis será incapaz de sostener un peso en el aire debido al fuerte dolor que sentirá en el codo. El movimiento en el agua será posible debido al ser un medio ingrávido, no existiendo movimientos bruscos ni en contra de la gravedad. Para ello trabajará el desarrollo muscular de toda la zona afectada, y la recuperación de la funcionalidad de dicha zona.
Tonificación muscular en zonas puntuales.
Se pretenden realizar dos acciones parecidas a la hora de tonificar; una de
ellas es fortalecer, robustecer, es decir, adquirir más fuerza. Y la otra consiste en, vigorizar, ganar en vivacidad o energía. Todo esto se consigue producto de la resistencia propia del agua. Realizando desplazamientos (aquarunning), moviendo agua con las manos, etc.
Personas que necesitan por un lado reducir grasa de determinadas zonas corporales, y por otro lado aquellas que necesitan adquirir un mayor grado de fuerza. Atrofia muscular o con la musculatura muy laxa y que han de ser endurecidas, para el correcto desarrollo de todo su esquema corporal.
Estiramientos o streching para la mejora de la flexibilidad.
Se pretende mejorar el rango articular de las diferentes partes afectadas o limitadas en movimiento, como hombros, rodillas, cadera, etc. De tal forma que hombros dolorosos por ejemplo, con escasa funcionalidad adquieran una movilidad perdida desde hacía tiempo. Además, de remitir en gran parte las molestias y sensaciones de invalidez en muchos casos.
Actividades para la mejora de la capacidad aeróbica.
Esta capacidad permite a la persona realizar actividades físicas durante períodos de tiempo prolongados. Esto implica que el corazón, que es el principal motor cardiovascular se transforme en una bomba más fuerte y eficaz. En personas que están pocos o nada entrenados este cambio es bien notable, ya que sus ganas por realizar sus tareas cotidianas y su día a día cambia para bien. No se cansan tanto para llegar al gimnasio, les cuesta menos realizar sus faenas, etc.
Para conseguir estos beneficios es bueno reseñar que el trabajo cardíaco oscilará entre el 65-85% de la frecuencia cardiaca máxima.
Actividades para mejorar la resistencia músculo esquelética.
La resistencia músculo esquelética es la capacidad biológica que permite prolongar durante el mayor tiempo posible un esfuerzo de intensidad máxima.
Viéndose implicados huesos, articulaciones, músculos, tejido conectivo, tendones y ligamentos; partes dañadas en gran medida en gente mayor, sedentaria o lesionada. Observando la mayoría de estas personas limitadas su capacidad de realizar un determinado esfuerzo por un tiempo prolongado. Por ejemplo, una persona afectada con una epitrocleitis será incapaz de sostener un peso en el aire debido al fuerte dolor que sentirá en el codo. El movimiento en el agua será posible debido al ser un medio ingrávido, no existiendo movimientos bruscos ni en contra de la gravedad. Para ello trabajará el desarrollo muscular de toda la zona afectada, y la recuperación de la funcionalidad de dicha zona.
Tonificación muscular en zonas puntuales.
Se pretenden realizar dos acciones parecidas a la hora de tonificar; una de
ellas es fortalecer, robustecer, es decir, adquirir más fuerza. Y la otra consiste en, vigorizar, ganar en vivacidad o energía. Todo esto se consigue producto de la resistencia propia del agua. Realizando desplazamientos (aquarunning), moviendo agua con las manos, etc.
Personas que necesitan por un lado reducir grasa de determinadas zonas corporales, y por otro lado aquellas que necesitan adquirir un mayor grado de fuerza. Atrofia muscular o con la musculatura muy laxa y que han de ser endurecidas, para el correcto desarrollo de todo su esquema corporal.
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